Pionera trans y referente de la lucha por la igualdad de los derechos y libertades del colectivo LGTBI en España.
Con motivo de nuestra última exposición fotográfica “Unos cuerpos como flores” donde se muestran, entre otras, fotografías de grandes referentes del colectivo trans* de nuestro país, hemos querido aprovechar para realizar una serie de biografías donde poner en valor la figura de estas mujeres que dieron esos importantes primeros pasos y sin las que hoy no estaríamos donde estamos.
La primera a la que le queremos dedicar unas líneas es Manuela Saborido “Manolita Chen”, diva de la escena española y empresaria de éxito.
Ya desde muy niña descubre que sentía algo diferente en su cuerpo, algo que no entendía porque era solo una niña. Eran los años 40 en España y Manolita nacida en localidad gaditana de Arcos de la Frontera, a medida que crece se da cuenta de que era diferente, que desea cosas que generalmente se consideraban apropiadas solo para niñas. Desde joven se identifica como mujer y sufre el rechazo directo de la sociedad de la época, de su familia y del entorno más cercano.
Sólo tenía 6 años cuando su madre la hace trabajar vendiendo cupones en la calle, pero era objeto de constantes burlas por la forma afeminada de hablar. Más tarde, trabaja en una fábrica de gaseosas y en una zapatería, donde sufre el rechazo y la mofa por su feminidad.
A pesar de las dificultades Manolita no se rinde trabaja en el bar familiar que transforma creativamente, convirtiéndolo en un lugar referencia, pero las piedras en el camino continúan, y el negocio se cierra. Los abusos verbales y físicos debido a su orientación sexual, son una constante a lo largo de aquellos duros años en los que la autoridad prohibía su expresión de género.
A principios de los sesenta, decide emigrar a Barcelona, donde encuentra libertad en la comunidad LGBTQ+, aunque con duros trabajos sigue sufriendo la incomprensión social. No conoce la palabra “abandono” y con 16 años se convierte en vedette en París. Entra en la industria del espectáculo y triunfa con el espectáculo Plumas del Paraíso Arcos.
A lo largo de su vida, Manolita se ha enfrentado a la discriminación y rechazo por su identidad de género y orientación sexual pero su perseverancia la ha llevado a encontrar su lugar en el mundo, convirtiéndose en todo un referente que vive su verdad como una mujer fuerte y valiente.
Foto: Víctor Gracia