En los momentos más oscuros, el espíritu humano puede brillar con fuerza y determinación.
Nacida en el seno de una familia tradicional católica en España, con un padre militar y una madre siempre atenta y exigente, le impartieron una educación muy estricta en su infancia. Deborah buscaba algo que aún no comprendía y que nadie parecía estar dispuesto a explicarle.
De niña, Deborah se vestía con ropa de mujer, a pesar de la desaprobación en las miradas de las amistades familiares, para ella, era su forma de ser auténtica y de tener la certeza de que algo en su interior se revelaría muy pronto. A los catorce años, deja Sevilla y vive en Barcelona en la calle hasta que desde el entorno de la prostitución la ofrecen apoyo y ayuda. Será en Barcelona, donde Deborah moldea su carácter y se convierte en una mujer fuerte y decidida que perdura hasta hoy. Después de su servicio militar como paracaidista, trabaja como bombera en el Sahara y Canadá. Regresa a Sevilla, tiempo en el que conoce a alguien en tratamiento hormonal y que le inspira a comenzar su propio proceso, mientras, atiende a importantes mujeres y chicas de las casas de citas haciendo manicura y pedicura, pero su vida da un giro radical cuando se une a una compañía de varietés en el hotel Colón, donde comienza como segunda vedette y ascendiendo a primera.
Deborah, que ha dicho siempre “ser tu misma era un delito”, se enfrenta a lo largo de los años a arrestos injustos y abusos de todo tipo por parte de la autoridad de la época. En Palma de Mallorca, es insultada y amenazada por un agente, el llamado el Sevillano, y es testigo de torturas y vejaciones, pero de todo ello logra sobreponerse, y en Sevilla, donde es arrestada durante una redada y sufre abusos en la comisaría y en la cárcel, demuestra, una vez más, la inquebrantable capacidad de resistencia ante la adversidad que posee.
Esta nueva conmovedora historia, nos muestra a otra mujer increíblemente fuerte que, a pesar de las adversidades, nunca deja que su luz se apague. Su valentía para vivir auténticamente es ejemplo inspirador para muchas otras personas. Nos recuerda, que incluso en las circunstancias más difíciles, el espíritu humano puede brillar con intensidad y firmeza.