Carmen, nacida entre las cálidas tierras peruanas y madre de tres hijos, es una mujer con una determinación inquebrantable, llena de coraje, apasionada por la escritura y los libros y con un corazón de oro. Actualmente, la podemos encontrar trabajando en la sección literaria de Fnac C.C Vaguada, donde ha llegado gracias al curso de Reinserción Laboral del Ayuntamiento de Madrid y con la mediación de Transexualia. Carmen no solo ha sabido aprovechar las oportunidades que se le presentan, sino que las abraza con entusiasmo y las convierte en trampolines para su crecimiento personal y profesional. Día tras día, se entrega con pasión a su trabajo.
En Transexualia, nos enorgullece profundamente la persona que es y la profesional en la que se está reconvirtiendo día a día. A pesar de enfrentar desafíos monumentales y librar una batalla interna personal, Carmen ha construido gradualmente la versión más fuerte, positiva y valiente de sí misma que vemos hoy. Carmen es un claro ejemplo de éxito en el que queremos poner el foco y es un auténtico placer narrar y dar visibilidad a su historia, un relato, que a pesar de sus duras experiencias nos cuenta con sosiego, dulzura, y mucha determinación.
Durante los años en su Perú natal se sumerge en el fascinante mundo de la psicología, carrera que estudia, y se entrega con total dedicación. Pero su alma no se conformaba tan solo con eso y compagina su profesión, en su tiempo libre, con la dedicación a su verdadera pasión: el teatro, la danza y las artes escénicas. En esos rincones de su vida, Carmen se convierte en maestra y “tutora de la vida” de jóvenes de entre 16 y 21 años, que viven en entornos urbanos marginales y a los que no sólo enseña los secretos del teatro y la danza, sino que como ella misma dice: “me permite sembrar valores de tolerancia, respeto y solidaridad, y permitirles la posibilidad de que pudieran encontrarse internamente, humanamente. Era una forma de sacarles de donde estaban y ofrecerles la oportunidad de alejarles de un futuro posiblemente muy oscuro”. Es ahí donde su corazón late con más fuerza, donde la cultura y el arte se convierten para ella en herramientas poderosas para apartar a estos jóvenes de una vida llena de incertidumbre.
Orgullosa, Carmen nos cuenta cómo sus alumnos, que alguna vez pisaron escenarios peruanos bajo su guía, hoy en día siguen el camino del arte. Es más que una maestra; es una sembradora de sueños en tierras aparentemente estériles. Su dedicación enriquece vidas y le brinda una realización profunda al contemplar el impacto positivo que puede tener en aquellos que más lo necesitan y eso es lo que hoy día también marca el camino al que Carmen desea llegar.
Hace 22 años, Carmen llega a nuestro país, en busca de nuevos horizontes. Estudia cocina, pero descubre que su apetito por su vocación e ilusiones va más allá de los ingredientes en una cocina. Aunque cocina para su familia y amigos, siente que sus verdaderas inquietudes van más allá de los fogones. Demuestra su coraje al aventurándose a probar otros proyectos de nuevo centrados en el teatro para jóvenes con dificultades y, trabajos como el de seguridad en el que sufre sacrificados horarios y se enfrenta al desprecio y crueldad por parte de sus compañeros.
Sin embargo, Carmen, no desiste, se sigue formando y en medio de esos desafíos, comienza un proceso de transición interior, decide irse por un tiempo a Nueva York, donde emprende un viaje interno y regresa con más fuerza y determinación y, aunque todavía le esperaban momentos muy complicados que le hicieron flaquear apartándose de todo y de todos, se consigue levantar y superar las adversidades.
Es por entonces cuando llega a la Asociación, donde encuentra respaldo y ese espacio seguro que necesita en ese momento y de la que solo tiene palabras de agradecimiento por esta puerta que se le abre para poder dirigirse a lo que desea: “Cristina Jiménez, presidenta de Transexualia, me acoge y gestiona oportunidades para mí y mis compañeras y es cuando conozco el curso de Reinserción Laboral. Yo había hecho cursos del SEPE, pero este es diferente, es un curso único, distinto a lo que hay y he conocido hasta ahora”
Para Carmen, la novedad de este curso reside en que permite “realizar visitas presenciales a las potenciales empresas en las que podríamos optar a conseguir un puesto laboral y en las que se nos permite que los responsables de RRHH de las empresas nos conozcan de forma personal y directa algo que es fundamental para nosotras”, un hecho que hace que sus enormes barreras del día a día sean un poco menos altas y permite limar las etiquetas y los prejuicios que siguen encontrándose hoy día las personas trans que, como ella, se están abriendo camino. Además, comenta “gracias a Juanjo, nuestro profesor, que nos ha enseñado técnicas de venta, esta formación ha permitido que conozca herramientas comerciales y que encuentre dentro de mí recursos para poder seguir avanzando en mis propósitos. Este curso abre la puerta a poder tener una oportunidad”. Mientras continúa realizando el curso, Carmen ha logrado con tesón, un contrato estable en la sección literaria de Fnac donde se encuentra muy feliz ya que se dedica a lo que le apasiona como es la literatura y le permite el contacto con las personas algo fundamental para ella “desde el comienzo me he sentido muy bien acogida por mi coordinadora Alejandra Ortiz y mis compañeros Nicole, Aitana, Irene y Fernando que me recibieron, me enseñan y entrenan. La atención directa con las personas es un placer para mí y disfruto mucho cuando me piden que les recomiende algún libro o les oriente en alguna lectura”
En cada paso, Carmen demuestra una valentía inquebrantable, resistiendo el peso de las expectativas y desafiando los prejuicios. Sabe que este trabajo es un paso para un salto mayor en el futuro, del que habla con ilusión y piensa en un postgrado de “Terapia de pareja sexual” que tiene la convicción de sacar adelante en cuanto pueda conseguir los recursos, así como recuperar ese proyecto de teatro/danza para jóvenes con grandes dificultades con el que tanto puede aportar a otros. Para ella este curso es un paso para poder hacer cosas mayores y aconseja a otras personas trans que es una oportunidad siempre que “desees que lo sea, y que tengas la convicción de “creer” que puedes hacerlo.
Su historia no solo es la de una mujer transexual, es la de una guerrera que, a través del arte, la cultura y su propia autenticidad, va iluminando caminos para aquellos que buscan una salida. Carmen no solo se conoce a sí misma, ha logrado meritoriamente y con mucho esfuerzo un buen trabajo, sin dejar de motivar y enseñar a otros a hacer lo mismo, y dejando una huella imborrable en cada corazón que toca.
