Artículo extraído de la edición digital de El Mundo (fragmento).
Leer el artículo original en www.elmundo.es | Emilio de Benito
Un solo día duraron las prácticas como técnica de operaciones aeroportuarias (azafata de tierra) de Lorena González. La mujer, de 45 años y española de origen colombiano, recibió tras su primera jornada una llamada de la Escuela Superior de Aeronáutica en la que le comunicaron, según su relato, que la aerolínea donde iba a trabajar un mes gratis la había rechazado “porque creían que era un hombre”.
El curso le costó 4.200 euros. González empezó esta última parte de su formación el 3 de septiembre en Turkish Airlines. “Al día siguiente me llamó Manuel Tenorio, responsable de prácticas de la escuela, y me dijo que Turkish le había llamado y le había dicho que yo daba mala imagen, que creían que era un hombre”, cuenta González. “Si eso le dijeron, conmigo se equivocan; no me han visto”, relata la mujer. “Tenorio me dijo que me sincerara, y me preguntó si era un hombre. Yo le dije: ‘Que yo sepa, no”. El Mundo ha intentado hablar por teléfono con el director de la escuela, Fernando Gómez, y le ha escrito un correo por indicación de una persona que atendió la llamada, pero no ha recibido respuesta.