Sin duda, 2020 está siendo un año extraño, lleno de incertidumbre, crisis sanitaria, social y económica pero también está siendo un año en el que el colectivo trans ha vivido y vive unos meses muy intensos. A la vez atacado por muchos y muchas pero también defendido por tantos otrxs.
Este 20 de noviembre volvemos a “celebrar” el día internacional de la memoria trans y más allá de darle más voz a estos ataques tránsfobos, tan solo queremos remitirnos a los datos que explican por si mismos la importancia de esta ley por la que estamos luchando.
Según recoge el Observatorio de Personas Trans Asesinadas (TMM, por sus siglas en inglés), entre el 1 de octubre de 2019 y el 30 de septiembre de 2020, 350 personas trans y de género-diverso han sido asesinadas. Este dato nos dice que se ha producido un incremento del 6% en comparación con los datos de 2019. Los países donde más asesinatos se han registrado han sido Brasil (152), México (57), y los Estados Unidos (28).
Además, en el histórico de los 75 países que recoge este informe, entre enero de 2008 hasta el 30 de septiembre de 2020, 3664 personas trans y de género diverso han sido asesinadas. De estos miles de casos, el 98% son mujeres trans o personas trans femeninas.
Si nos fijamos en datos más concretos, destaca que el 79% de las personas trans asesinadas en este tiempo en EEUU son personas de color y que de todas las personas trans asesinadas en Europa, el 82% eran migrantes por lo que podemos concluir que la violencia transfóbica se ceba con las personas racializadas.
A toda esta violencia que, como indican los datos ya viene de lejos, hay que sumarle la manera desproporcionada con la que la pandemia está impactando en las personas trans de todo el mundo, sobre todo aquellas personas en situación de vulnerabilidad, racializadas, migrantes, trabajadoras sexuales, etc.
Desde Transexualia, como miembrxs de la Federación Plataforma Trans, federación que aúna el 95% de las entidades específicas trans en España, no descansaremos y seguimos sumándonos a las reclamaciones intensificadas en estos últimos meses. Reclamamos una Ley Estatal Trans que unifique las ya existentes en muchas comunidades. Nuestros derechos son derechos humanos y no borran a nadie. Esta ley impulsada por nuestra Plataforma solo busca contar con una base legal para que más pronto que tarde, esta igualdad de derechos sea real en nuestro país también a niveles prácticos.